Las bodas íntimas, con pocos invitados, son tendencia. Tanto si lo haces por decisión propia como si se trata de una imposición debido a las circunstancias, celebrar una pequeña boda no significa renunciar a que sea especial.

En AFH nos adaptamos a cualquier necesidad, y tanto si quieres una boda multitudinaria como si prefieres una celebración con poca gente, podemos encargarnos de todo. En este artículo te vamos a dar algunas ideas para bodas pequeñas que no tienen nada que envidiar a los grandes eventos reales.

Vestíos juntos, una idea original para vuestra pequeña boda

Si no sois supersticiosos y lo de no veros antes de la boda os importa poco, podéis empezar vuestra celebración vistiéndoos juntos. Una forma de empezar el día y pasarlo entero sin separaros. Comenzar tomando un café, peinaros e iros ayudando para prepararlo todo sin más ayuda que la del uno al otro. Tomaros vuestro tiempo para hablar y sentir la emoción de unir vuestras vidas para siempre desde primera hora del día, juntos.

Escribir vuestros votos

Escribir vuestros propios votos hará que una pequeña boda sea aún más personal. Además, podréis guardarlos como un detalle muy especial, que quedará grabado en la memoria y que incluso se puede enmarcar, para recordar las promesas que os hicisteis. Incluso podéis hacer que alguien os grabe leyendo los votos, y que lo incluya en el vídeo de la boda si lo vais a hacer, o solo para tenerlo guardado. ¿Te falta inspiración? Echa un vistazo a este post sobre votos originales.

Prepara alguna sorpresa

Algo inesperado durante la celebración, bien algún detalle de boda romántico o algo gracioso, puede hacer que todo se anime. La idea es que nadie sepa nada, o al menos nadie que no participe en ello. Es muy interesante ver la cara de todo el mundo cuando suceda.

Cambiaros de ropa

Imagina que al llegar al banquete estáis vestidos con la ropa de la ceremonia, salir un momento y de repente volvéis y os habéis cambiado. También puede servir como sorpresa, aunque esta vez solo para los invitados. Poneros de acuerdo y a medio banquete aparecer con otra ropa. ¡Seguro que causáis sensación!

Que no falte la tarta

Que vayas a celebrar una pequeña boda no significa que los símbolos tradicionales se pierdan. Por ejemplo, la tarta es algo que no puede faltar. No solo porque los invitados esperan rematar el banquete con algo dulce, sino porque os merecéis comenzar vuestras vidas con un sabor especial. Si todavía no tenéis una tarta preferida, es el momento de elegirla. Hay quien no se puede resistir al chocolate de una Selva Negra, mientras que otras parejas prefieren la tradicional San Marcos. Por supuesto, también puedes innovar y probar algo diferente como un glaseado de lima o una tarta de limón y fresas. ¿Quién puso límites al momento de la tarta?

Esperamos que estas ideas os sirvan para celebrar por todo lo alto una pequeña boda. Y si quieres más ideas, llámanos y te ayudaremos a organizarlo todo de la forma más espectacular.

Recordar que al coger nuestra finca entera en exclusividad, el aforo mínimo de la misma los Viernes y Domingos es de 75 personas.