Ser madrina en una boda es algo muy especial y emotivo, y más si se trata de un hijo. Por ello, los ojos de los invitados también se fijarán en esta figura, y hay que estar a la altura del momento.
Los protagonistas de ese día son los novios, y más aún la novia; por lo que nunca el traje y demás complementos tanto de madrina como demás invitadas no debe llamar la atención o querer ser el centro de interés. Esta sería la primera norma de protocolo ante una boda: jamás intentar eclipsar a la novia.
En cuanto a qué ponernos, depende del momento del día en el que sea el enlace. Generalmente la madrina admite un traje tipo cóctel de una pieza y de manga francesa; además, junto a la novia, es a la única a la que se le permite ir de largo en una boda de día.
Lo ideal sería que entre las dos madres (las de los novios), hablaran entre ellas para ver más o menos qué va a llevar cada una. De este modo evitaremos repetir estilo, color o modelo el día de la boda.
Si vais a ser unas madrinas tradicionales y queréis emplear mantilla para ese día, os vamos a dejar algunas recomendaciones.
El uso de la mantilla para una boda
Después de los novios, la madrina es la tercera figura más importante en una boda. Pese a que la tendencia está decayendo, aún en ciertos puntos de España se sigue haciendo uso de la mantilla para una boda. El protocolo admite este complemento sin inconvenientes para un enlace.
La mantilla visualmente resulta muy elegante; y casi seguro un acierto. Pero es muy importante saber combinarla con el traje o vestido que se vaya a llevar ese día.
- Boda de día: en este momento lo más recomendable es llevar un traje corto, tipo cóctel, por debajo de las rodillas. Como hemos dicho antes, aunque sea de día, la madrina es la única que junto a la novia se le admite el uso de un vestido o traje largo.
- Boda de tarde / noche: la mantilla se lucirá con traje largo.
- Lo ideal es que el uso de la mantilla para una boda se haga con vestidos de una sola pieza; y el corte de la manga sea francesa o larga.
- Tradicionalmente, la mantilla blanca o de color marfil la visten las mujeres solteras, o que no tienen pareja en ese momento por diversos motivos; mientras que la negra, queda totalmente reservada para mujeres casadas. Esto es así si nos ceñimos estrictamente al protocolo de bodas. Por lo general, las mantillas de colores no están bien vistas.
- En cuanto al largo de la mantilla, esta no debe sobrepasar el largo del vestido o traje que llevemos. La parte delantera como máximo tiene que llegar a la altura de las manos.
- La altura de la madrina es otro factor a tener en cuenta para llevar mantilla: si es alta, mejor una mantilla larga; y si es más bien baja, mejor una mantilla corta, para no crear un efecto de achatamiento.
- Otro punto recomendable es fijar la mantilla a los hombros, para evitar situaciones incómodas. De este modo no se irá para los lados y si hace viento, estaremos más seguras.
- Los materiales más usados para la confección de mantillas son la blonda, el tul y el chantilly.
La peineta, elemento fundamental
Otro elemento indispensable para el uso de la mantilla en una boda, es una peineta; soporte de este complemento. El mejor material suele ser de carey, material muy resistente, cuando la mantilla es negra; y de nácar cuando es clara.
También dependiendo de nuestra fisionomía, vamos a optar por una peineta alta o baja: si somos madrinas de estatura media, una peineta alta sería una buena opción; aunque son más difíciles de llevar. Si por el contrario somos madrinas altas, recomendamos una peineta baja.
Cuándo no usar mantilla
No es adecuado llevar mantilla cuando el traje del novio es muy sencillo. Se produciría un contraste de estilos y de foco de atención que no es idóneo en una boda.
Otra situación en la que la madrina no debería lucir mantilla, es si su traje o vestido es muy moderno, con estampados llamativos, etc. La mantilla es un complemento clásico y no es nada protocolario combinar esos estilos.
Si la novia decide llevar para el enlace un vestido corto o moderno, no recomendamos el uso de la mantilla para una boda; o en su defecto, al finalizar la ceremonia cambiarlo por un tocado.
En Antigua Fábrica de Harinas haremos todo lo posible por aconsejarte sobre los detalles de tu boda; y en nuestro blog encontraréis consejos e ideas para el gran día; como en este post sobre consejos para una boda al aire libre.