Puede que la segunda gran decisión después de darle el ‘sí, quiero’ al vestido, sería decidir si queremos llevar o no velo.

En caso afirmativo, os plantearéis qué tipos de velos para novias hay; y cual os puede sentar mejor tanto a vosotras como a vuestro vestido.

Al igual que pasa con todos los detalles que hay dentro del mundo nupcial, en referente a clases de velos no iba a ser menos. Vamos a intentar daros unas nociones generales, características, y mostraros algunos originales para vuestro gran día.

¿Qué tipos de velos para novias hay?

Otro punto importante para determinar el tipo de velo, va a ser saber más o menos qué peinado queremos llevar.

Los velos pueden ser de muchos tipos de tela distintos, como encaje, tul, gasa… al igual que los adornos que lo complementen o el color. Muchas novias le dan un tono apastelado en rosa o azul, por ejemplo.

En cuanto a las capas, puede ser de solo una, que caiga por la espalda; o de dos o más capas. En este último caso, una de ellas será más corta e irá sobre la cara de la novia.

Velos cortos

 tipos de velos

Velo francés de rejilla

  • Blusher: es un velo de tul con doble capa, de mucho volumen, que hace recordar al antiguo glamour de Hollywood. La longitud de este velo es hasta los hombros, tanto por delante como por detrás.
  • Corto: este tipo de velo cae por los dos lados a la altura de los omoplatos, por debajo de los hombros.
  • Electrizado: dentro de los velos cortos se encuentra esta variación. La longitud es la misma pero la gran diferencia es que se compone de varias capas de tul, alcanzando un gran volumen y destacando.
  • Ruso, francés o jaula: Se trata de un velo que cumple la función de tocado, tapando parte de la cara de la novia; concretamente los ojos. Su estilo es más bien retro – vintage, y los materiales con los que se suele confeccionar son el tul o la rejilla. No importa el peinado que lleves, puesto que combinará bien con cualquiera. Es perfecto para bodas civiles.

Velos medios

  • Capa o fuente: este velo tiene un efecto ondulado, y es uno de los más usados en el mundo nupcial. Es más corto por la parte frontal y de forma gradual, por la parte de atrás, largo hasta la cintura. Es apropiado para vestidos de novia sin tirantes, o de tirantes muy finos.
  • Hasta el codo: este velo también es llamado con el término inglés elbow (codo). Suele partir del recogido o peinado de la novia, en una o dos capas; hasta la altura de los codos. Es el velo más elegido para las ceremonias civiles. Si vuestro vestido es sencillo, este velo puede llevar adornos por los bordes como encaje; y viceversa, si el vestido tiene detalles, es mejor que el velo sea sencillo.  
  • Hasta los dedos: fingertip es otro nombre que se le da. La altura de este velo es hasta los muslos o los dedos, de ahí su denominación.
  • Mantilla: con elegancia, carácter y personalidad, muchas novias españolas tienen como opción la mantilla para el día de su boda. Enmarca por completo el rostro de la novia, ya que cae desde arriba, deslizándose por los hombros. Según el protocolo, la mantilla debe llevarse solo durante la ceremonia. Combina a la perfección con vestidos minimalistas o sencillos.
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Velo hasta el codo

Velos largos

  • Capilla: velo formal de dos capas, largo por detrás hasta sobrepasar 10 cm la longitud del vestido de novia. Lo podemos adaptar y si no nos gusta doble, hacerlo de una sola capa que caiga por detrás. Este sobresale poco del vestido, a diferencia del siguiente velo. Es perfecto para novias de rostro redondo, ya que por su caída, afina los rasgos.
  • Catedral: se trata de uno de los velos más solemnes y tradicionales. En este caso la tela se extiende sobrepasando la cola del vestido (si tiene), y puede alcanzar una longitud de más de dos metros y medio en total. Es uno de los más usados para bodas en iglesias o catedrales. Si tu vestido tiene adornos y llama la atención por sí solo, es mejor que optes por un velo más sencillo que este; y al revés: si se trata de un vestido de novia sencillo, el mejor complemento es un velo catedral.
  • Real: podemos acuñar este nombre a los velos llevados por las princesas en sus bodas reales; con un largo que va de los 3 a los 6 metros de longitud.
  • Vals: su nombre procede de la comodidad de este velo para poder bailar un vals. Es de una sola capa y largo hasta los tobillos. Perfecto para vestidos de novia sin cola.

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